Cada verano son incontables las familias que enrumban sus automóviles hacia el litoral andaluz en busca de una dosis justa de bronceado, relax y arenas finas. En efecto, sus más de doscientas playas agraciadas con el aire del Mediterráneo, se encuentran a prueba de todo capricho, y como tal, podemos encontrar playas discretas y populares, cerradas o abiertas, urbanas y apartadas, o tal vez, ideales para hacer surfing o repletas de chiringuitos. Ahora bien, ¿Qué sucede cuando vamos con niños? ¿A cuál de estas playas acudir con toda seguridad? Veamos.
Las Negras
Ubicada en la provincia almeriense, la playa de Las Negras hará las delicias de nuestros niños y nos aportará la total garantía de sentirnos en un lugar seguro. De manera general, el lugar cuenta con servicios sanitarios y equipos de salvamento, además de poseer una barrera natural, conocida como “las Esperillas” que mantiene el agua de la playa sin oleajes bruscos. También nos encanta de este lugar la combinación de arena dorada con hermosas piedras negras de origen volcánico.
Mónsul
A escasos kilómetros de San José, Almería, la playa de Mónsul es otra de las riquezas que atesora el territorio andaluz. Aunque no cuenta con servicios (debemos ir preparados con todo lo necesario), el mero hecho de hundirnos en sus aguas cristalinas y disfrutar de un paisaje sobrecogedor, hacen que valga la pena acudir al encuentro de esta playa. Para acceder a ella, podremos hacerlo en coche, autobús o en bicicleta desde el propio pueblo. Tu pequeño lo disfrutará al máximo.
La Herradura
Evidentemente, el nombre de esta playa alude a su forma de herradura y se encuentra en la Bahía del mismo nombre perteneciente a la provincia de Granada. Dentro de la propia Bahía también podremos asistir a la desembocadura del río Jate y el Cerro Gordo, que devela desde lo alto, como un mirador natural y bondadoso, el litoral granadino y malagueño. Además, la playa cuenta con servicios de tiendas, heladerías, parque infantil y festival de títeres.
Nerja
A lo largo de 14 kilómetros costeros, el municipio malagueño de Nerja abarca hermosas playas, algunas saciadas por la creciente urbanización del lugar y otras apartadas para quien busca un poco de paz junto a su familia. Por nuestra parte, recomendamos especialmente la Burriana y la Torrecilla, que además de los servicios básicos, también podemos complementar con excursiones espectaculares y rutas programadas, como por ejemplo el viaje a las Cuevas de Nerja o la ruta de los Cachorros del río Chillar.
Fuengirola
Sus aguas tranquilas y arena fina la convierten en una zona propicia para los más pequeños de la familia, porque además posee varias zonas infantiles y parques donde recrearse. En ocho kilómetros de playa, Fuengirola tiene todo lo necesario para pasar un día perfecto en familia, y aunque está ubicada en un centro urbano, podemos sacar ventaja de ello con un paseo marítimo exquisito para pasear la zona, excursiones al Bioparc, parque acuático de Mijas, o acudir al supermercado.
Torre del Loro
La Torre del Loro se encuentra en Mazagón, y se trata de una playa natural inconfundible por las ruinas que acompañan sus aguas. La torre en sí, cumplía función de vigía contra los ataques navales en el pasado, y actualmente sus ruinas sirven como ornamento para los bañistas que deciden abandonarse a las aguas de la playa, que además cuenta con servicios de camping y es accesible a pie. En la misma zona, podremos visitar además el Parque Nacional de Doñana.