El 27 de septiembre de 2023, seis jóvenes portugueses sentarán en el banquillo a 32 estados por no combatir el calentamiento. Los países demandados son todos los miembros de la Unión Europea (UE), además de Noruega, Rusia, Suiza, el Reino Unido y Turquía.
El litigio climático, que tendrá lugar en la sede de Estrasburgo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), tiene por objetivo que las naciones endurezcan sus compromisos climáticos y podría crear precedentes a nivel de la justicia climática.
Los seis jóvenes, de entre 11 y 24 años, decidieron actuar tras los violentos incendios de 2017 que quemaron decenas de miles de hectáreas y dejaron más de 100 muertos en Portugal. En 2020, presentaron el caso ante el TEDH, alegando que la crisis climática interfiere con varios de los preceptos que protege la Convención Europea de Derechos Humanos.