La Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE) ha denunciado que el actual sistema de becas, que considera “restrictivo, excluyente y no suficientemente dotado económicamente”, está provocando la “desmotivación” y “abandono” de muchos universitarios.
Así lo expresa en su informe anual “La universidad española en cifras. Año 2017 y curso académico 2017/2018”, basado en más de un millón de datos, facilitados por 48 universidades públicas y 19 privadas.
En él se explica que las exigencias que le plantea a una persona el acceso a los estudios universitarios son de dos tipos: académicas y económicas. En relación a la segunda, se reconoce a esta como determinante para el acceso y la permanencia en los estudios universitarios. Por ello, se plantea la siguiente cuestión: “¿Hay igualdad de oportunidades para el acceso y la progresión en la educación universitaria?”.
En respuesta a ello, se comenta que “las exigencias académicas establecidas para el acceso y el mantenimiento al beneficio de la beca no pueden actuar ralentizando la presencia en los estudios universitarios de las personas más desfavorecidas”. Es decir que aunque hay alumnos que cumplen las condiciones económicas para acceder y mantener una beca, por requisitos académicos se ven abocados a realizar un esfuerzo económico suplementario que, en muchos casos, les empuja a abandonar los estudios universitarios.
Por ello, los rectores consideran que el sistema de becas en España es “excluyente”, dejando fuera de las ayudas a más de 45.000 alumnos que cumplen las condiciones económicas para acceder a las ayudas, pero no los requisitos académicos. También califica al sistema de “insuficiente” al ofrecer a los alumnos económicamente más desfavorecidos un importe de anual de 2.550,4 y 2.624,4 euros, en función de si son estudiantes de grado y máster. Durante el curso académico 2017/18, estos becados recibían 4.050,4 y 4.124,4 euros, respectivamente, si la beca contemplaba cambio de residencia familiar.
