Uno de los alumnos de Dylan Selterman, profesor de psicología de la Universidad de Maryland, publicó en Internet una de sus preguntas planteadas en las pruebas de final de curso que, rápidamente, se convirtió en un fenómeno viral.
El docente les propuso el siguiente dilema a sus estudiantes:
“Aquí tenéis una oportunidad para ganar algunos puntos extra en vuestro examen final. Selecciona si quieres 2 puntos o 6 puntos que se añadirán a la nota final. Pero hay un pequeño detalle: si más del 10% de la clase selecciona 6 puntos, nadie conseguirá ninguna puntuación extra. Vuestras respuestas serán anónimas para el resto de la clase, sólo yo la veré”.
Tras responder a esta cuestión, nadie de la clase pudo obtener una calificación más alta. De hecho, según Selterman, tras ocho años proponiendo el ejercicio, sólo en una ocasión los alumnos mejoraron sus notas.
Él mismo, cuando estudiaba en la Universidad Johns Hopkins, tuvo que enfrentarse al dilema. Aunque él se decantó por sumarse 2 puntos, más del 10% de sus compañeros optaron por los 6, por lo que nadie consiguió puntuación extra.
Para el docente, esta actividad demuestra que el ser humano tiende a actuar de manera individualista o egoísta. No obstante, la colaboración para alcanzar un fin común puede resultar mucho más beneficiosa para todos.
Este ejercicio es considerado por los expertos en psicología como una versión del “Dilema del prisionero” del matemático Albert W. Tucker, en el que los alumnos deben elegir entre traicionar a un compañero de delito o no hablar con la policía.
Cuando se elige la primera opción, el delator queda libre y el compañero es condenado a tres años de cárcel. La segunda opción hace que ambos cumplan un año de condena. Sin embargo, si los dos deciden ser delatores, ambos pasan dos años en la cárcel.