The Guardian ha publicado que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) utilizaba Angry Birds para obtener información acerca de los usuarios.
Rovio, la casa responsable del juego, que ha tenido más de 1.700 millones de descargas, ha afirmado que no tenía ningún conocimiento del espionaje que llevaba a cabo la NSA.
Las aplicaciones para móviles pueden resultar muy útiles a la hora extraer información relacionada con sus usuarios: ubicación geográfica, número de teléfono, dirección de email, lista de contactos, etc.
Asimismo, los perfiles de las redes sociales nos pueden ayudar a descubrir el género de una persona, sus gustos y aficiones, el estado civil, relaciones, nivel educativo, preferencias sexuales, grupo étnico, familiares, etc.
Una vez más entran en conflicto el seguimiento de telecomunicaciones realizado por los organismos dedicados a la defensa de la seguridad nacional y la privacidad de los usuarios de Internet y aplicaciones móviles.
