Entre calas y arenales, las playas de Asturias suman doscientas. Por tal razón, decantarnos por cualquiera de ellas para sacarle el máximo provecho a nuestras vacaciones, es una cuestión meramente de gustos. No importa si prefieres la arena fina o gruesa, si gustas de la intimidad de las calas cerradas o tal vez, solo buscas un espacio para practicar tus habilidades de surfista, los 350 kilómetros de costa asturiana cuentan con opciones para todos los gustos, además de numerosos servicios náuticos y una oportunidad única de decirle adiós al estrés laboral y aliviar el calor de la temporada estival. ¿Quieres saber cuál es tu playa? Acompáñanos en esta travesía.
Playa de Xagó
Ideal para los entusiastas del surf y el windsurf, pues los fuertes vientos de la zona proporcionan un oleaje perfecto para estas actividades deportivas. Además, las playas de Xagó cuentan con numerosos servicios para los visitantes como duchas, chiringuitos, aparcamientos y puesto de vigilancia y salvamento. Adicionalmente, la playa fue declarada como Paisaje Protegido gracias a un conjunto dunar impecable de más de 350 000 metros cuadrados, lo que la hace un paraje hermoso e irresistible. Como extra, existen además varias zonas nudistas dentro de la playa.
Playa de Rodiles
Otra de las exquisiteces que podemos encontrar a nuestro paso por Asturias. Perteneciente al concejo de Villaviciosa, la Playa de Rodiles también apuesta fuertemente por el surf, tanto es así, que posee una ola conocida como “la Barra” considerada como una de las mejores del continente europeo. Por otra parte, la región atesora numerosos hallazgos que datan del período jurásico, lo que sumado a la hermosura de su arena y la amplia variedad de servicios que presta, podemos decir que estamos ante una de las playas más frecuentadas por turistas de todo el globo terráqueo.
Playa de Barro
Si debiéramos resumir con una palabra esta playa, sería sin duda idílica. Su diseño en forma de concha nos aporta una sensación única de intimidad y sosiego, puesto que se encuentra custodiada por dos acantilados que brindan un aspecto muy peculiar. Ubicada en Llanes, dentro la localidad de Barro, esta playa se encuentra catalogada como paisaje protegido por la Red de Espacios Protegidos de Asturias, y por si todo esto no fuese suficiente, te comentamos que posee un bar a pie de playa muy propicio para nuestro relax.
Playa de Xivares
Llegamos al apartado de playas para pasear y disfrutar del entorno, y nuestra ganadora indiscutible es la Playa de Xivares, ubicada en la parroquia de Albandi y reconocida por su peculiar vegetación y la vista que nos regalan los acantilados de El Tranquero. Además, se encuentra compuesta por tres calas en forma de concha que se abrazan en altamar, por lo que muchos visitantes contarán con un gran espacio para explorar, tomar fotografías y por supuesto, deleitarse con sus aguas cristalinas. Entre los servicios que presta, la playa cuenta con lavabos, equipo de salvamento y ofertas gastronómicas.
Playa de El Silencio
Su nombre nos indica claramente de qué va esta playa. Quien guste de un ambiente solitario y apartado del bullicio que generan las playas más populares, encontrará en la Playa del Silencio un nicho de sosiego único, ornamentado con cantos rodados y un acantilado a la derecha para quien se anime a buscar una vista inmejorable de la región. Otra cosa que te sorprenderá de esta cala es la transparencia de sus aguas, prestas a revelarnos los tesoros del fondo marino sin esfuerzo y contribuir a una velada inolvidable.
Playa de Santa Marina
Finalmente, y si se trata de playas urbanas, la mejor de las escapadas la podrás realizar hacia la Playa de Santa Marina en la parroquia de Ribadesella. Paisaje protegido y una de las más grandes de Asturias, este rincón de paraíso es la puerta natural del río Sella hacia el océano, que además posee un paseo marítimo y uno de los atardeceres más memorables de la región. Para completar su atractivo, la playa es refugio de numerosas huellas de dinosaurios, así como varias villas e indianas.